En una decisión controvertida, el Partido Revolucionario Institucional (PRI) de México ha aprobado una reforma a sus estatutos que permite a su actual líder, Alejandro Moreno, mantenerse en el cargo hasta el año 2032. Esta medida, adoptada durante la Asamblea Nacional del partido el pasado fin de semana, ha generado debates y críticas entre los miembros del PRI y la opinión pública en general.
La reforma de los estatutos del PRI
La modificación del artículo 178 de los estatutos del PRI ahora permite que Alejandro Moreno pueda ser reelegido como dirigente del partido por ocho años más, extendiendo su mandato hasta 2032. Esta decisión fue aprobada por mayoría durante la Asamblea Nacional, a pesar de que algunos grupos dentro del partido expresaron su desacuerdo con la medida.
Alejandro Moreno, actual presidente del PRI, defendió la reforma y criticó a los miembros del partido que se han distanciado de la actual dirigencia. Durante su discurso, Moreno calificó a estos priistas como “una bola de cínicos, lacayos y esquiroles al servicio del gobierno y de sus intereses” que buscan “romper la unidad a cambio de impunidad”.
Las reacciones y el debate interno
La aprobación de esta reforma ha generado un intenso debate dentro del PRI. Algunos miembros del partido han expresado su descontento y han cuestionado la legitimidad de la medida, argumentando que limita la democracia interna y la renovación del liderazgo.
Por otro lado, los partidarios de Moreno han defendido la reforma, argumentando que le permitirá al PRI mantener la estabilidad y la continuidad en su dirección. Incluso, Moreno afirmó durante la Asamblea que “lo mejor que le puede pasar a México es que el PRI vuelva a gobernar”, y que el partido “construyó las escuelas públicas, las primarias, las secundarias, las preparatorias, el Politécnico y la UNAM”, lo que constituye su “legado”.