Es interesante observar cómo los precandidatos utilizan las redes sociales como herramienta fundamental en sus estrategias de precampaña. La presencia en plataformas como Twitter, Instagram y Facebook les permite llegar a diferentes segmentos de la sociedad y transmitir sus mensajes de manera directa.
Es importante destacar que el número de seguidores no es el único factor relevante; la interacción, el alcance y la autenticidad de las publicaciones también desempeñan un papel crucial en la efectividad de la presencia en redes sociales. Este aumento en la importancia de las redes sociales en la política refleja la evolución de la sociedad y cómo la comunicación política se adapta a las nuevas formas de conectividad. Los candidatos buscan aprovechar estas plataformas para construir y consolidar sus bases de seguidores, así como para llegar a nuevos electores.
El desafío radica en utilizar estas herramientas de manera efectiva, aprovechando la viralidad y el alcance que ofrecen las redes sociales, sin perder de vista la autenticidad y la coherencia en sus mensajes.
Estos son los seguidores de las redes sociales de los tres precandidatos:
| Redes sociales | Claudia Sheinbaum | Samuel García | Xóchitl Gálvez |
| Twitter (X) | 2,700,000 | 344,900 | 789,200 |
| 533,000 | 1,800,000 | 221,000 | |
| 1,500,000 | 2,500,000 | 549,000 | |
| Total | 4,733,000 | 4,644,900 | 1,559,200 |
En la tabla proporcionada, se destaca que Sheinbaum lidera en redes sociales con 4 millones 733 mil seguidores, encabezando exclusivamente en Twitter (X). Samuel García le sigue de cerca con un total de 4 millones 644 mil 900 seguidores, liderando en plataformas como Instagram y Facebook.
Por último, Xóchitl Gálvez es la candidata con menos seguidores de los tres, sumando un total de 1 millón 559 mil 200 seguidores, sin liderar en ninguna de las redes sociales mencionadas.
A primera vista, se observa que Xóchitl Gálvez cuenta con un menor reconocimiento de imagen en el público en comparación con los otros dos candidatos. Aunque es importante señalar que, como se ha mencionado, las redes sociales no son el único factor determinante en una contienda presidencial, sí representan un aspecto esencial en la misma.
